jueves, 23 de agosto de 2012

Cuando las cosas salen mal. Golpean a estafador y casi lo matan


Un arquitecto de la zona de Caseros, provincia de Buenos Aires, fue escrachado por sus damnificados mientras se grababa un programa de televisión, quienes luego de discutir y ante la violecia que desplegó, primero con un fierro y luego con un arma, fue reducido y virtualmente "molido a palos", según indicaron fuentes policiales.
Se trata del arquitecto Guillermo Ricci, titular de la firma Servicios Inmobiliarios Hormigonarq SA con oficinas en la ciudad de Caseros, partido de Tres de Febrero, en el conurbano bonaerense, quien fuera increpado por una docena de damnifados por sus estafas vinculadas a la construcción de viviendas y refacciones, mientras filmaban las escenas un equipo periodístico de un canal nacional.



En la mañana de ayer se hicieron presentes junto a las cámaras de un canal de televisión que habitualmente cubre este tipo de estafas junto a un conocido periodista de policiales. Durante el encuentro en la calleCaferatta 5692 de la localidad de Caseros, el arquitecto increpó con un fierro a los damnificados y luego con un arma que extrajo de una camioneta 4x4 blanca.

El grupo periodístico y los clientes estafados por Ricci quedaron paralizados en un primer momento pero luego de unos forcejeros en los que el profesional cayó al piso, pudo sacársele el arma, tras lo cuál los enfurecidos clientes golpearon al estafador.

Según informó la Policía bonaerense, Guillermo Antonio Ricci tenía ya en su haber una docena de denuncias de particulares de diversas zonas de la provincia de Buenos Aires, entre las que se encuentra la ciudad de La Plata, Mar de Ajó, Moreno, Almirante Brown y Pinamar.

Para consumar su estafa, Ricci utilizaba un sistema doble de empresas entre las que se encuentra una sociedad anónima llamada Hormigonarq Servicios Inmobiliarios y a un testaferro que en realidad es un humilde albañil de origen paraguayo, semianalfabeto, al que le Ricci le había hecho firmar un Poder frente a un escribano.

Al momento de firmar los contratos, por cientos de miles de pesos, Ricci cambiaba la empresa Hormigonarq SA por la cuenta del obrero monotributista con el nombre de fantasía Hormigonarq, por cuanto al momento de reclamar judicialmente los daños, los damnificados se enteraban que habían suscripto contrato con un insolvente.

Guillermo Ricci fue trasladado al Hospital Italiano de Caseros donde se repone de la golpiza aunque su pronóstico es reservado.